Compuesto por el Museo de Arte Contemporáneo MICA (con ocho salas de exposiciones), un teatro con capacidad para 1,800 personas, instalaciones de apoyo, un aula magna y una sala polivalente, cafetería y tienda de souvenirs, surge Changsha Meixihu International Culture & Arts Centre, un nuevo centro de cultura y arte en la provincia de Hunan, al sur de China, el cual fue diseñado por el despacho de Zaha Hadid Architects.
Se trata de un complejo integrado por tres instituciones culturales independientes, pero complementarias. El inmueble –cuya estructura recuerda a una madeja de tela enrollada–abarca un total de 115,000 m2 y destaca por un lenguaje arquitectónico orgánico definido por las rutas peatonales que recorren el recinto para conectarse con las calles vecinas, las cuales además desembocan en maravillosas vistas al lago Meixi y acceso a los parques y senderos.
Las actividades que se llevan a cabo en la edificación de sinuosas curvas son diversas y dependen del recinto; en el caso del museo, la primera exposición Flowing Eternity ya se encuentra abierta y consta de un trabajo inmersivo de Motse, un grupo de 40 artistas que utilizan tecnologías innovadoras en nuevos medios para explorar la cultura contemporánea.
Por su parte, el teatro está diseñado para montar la más diversa variedad de artes escénicas, mientras que su sala polivalente con capacidad para 500 personas se caracteriza por la flexibilidad para configurar perfectamente desde pequeñas obras de teatro, espectáculos musicales, desfiles de moda y banquetes hasta eventos comerciales. Alrededor de estos recintos conviven ocho galerías de exposiciones yuxtapuestas, que suman un total de 10,000 m2, con un atrio en medio que funciona muy bien para llevar a cabo instalaciones y eventos a gran escala.
Este centro cultural forma parte de un plan de renovación urbanística para el centro de la ciudad de Changsha, el cual fue lanzado en el 2012 con el objetivo de hacer de esta provincia un polo versátil de negocios y de turismo.