Un jardín con un viejo cerezo: Cherry Tree House por SOA architekti en República Checa

Diseñado y ejecutado por SOA architekti, este proyecto aprovecha la diferencia de terreno en el diseño original. El suelo a pie de calle con pequeñas ventanas desaparecía en el terreno. La parte de la entrada de la casa recordaba a un sótano mal iluminado.

Afortunadamente, la posición final de la vivienda adosada tiene un pequeño jardín con árboles maduros. El jardín era de difícil acceso desde la casa debido a la diferencia de altura. Además, los ambientes principales estaban orientados en la dirección del sol pero dando a la calle.

La distribución interna correspondía a la división de la casa en departamentos separados en cada piso con una entrada común. La baja altura libre en el interior (2,5 m) definía su ambiente.

La adaptación, por tanto, requería la unificación de la casa en un todo para las necesidades de una sola familia. La escalera se convirtió en el centro del diseño.

La función de servicio de la planta baja se mantuvo sin cambios. Se transforma en una planta baja adecuada con la máxima luz natural. La ventana recién agregada al vestíbulo de entrada permite una vista incluso desde la escalera.

La extensión de la casa es más profunda bajo el terreno y al nivel del jardín, está cubierta por una terraza. Alberga un gimnasio en casa. El uso de diferentes construcciones se muestra en hormigón visto.

En el primer piso, las habitaciones individuales rodean la escalera central creando un espacio interconectado. Las conexiones visuales y las vistas al jardín se convirtieron en un elemento importante del diseño. Una gran puerta corredera conecta el salón con el jardín. El espacio libre y el cambio de altura del piso ayudaron a la conexión directa con el nivel del terreno del jardín. Debido a la mayor altura de la habitación, todo el piso se volvió más dinámico.

El piso superior alberga dormitorios accesibles desde una pequeña pasarela alrededor de la escalera. El dormitorio principal tiene vestidor y baño privado. La sala de estudio previamente planificada se transformó durante la construcción en un dormitorio adicional.

La división exterior de la casa se basa en la forma uniforme de la mansarda original. El revestimiento de la fachada de placas de fibrocemento hace la transición a la cubierta. Las ventanas de roble con acristalamiento sin marco están conectadas ópticamente con el borde del techo. El revestimiento del techo integra una persiana retráctil que cubre toda el área de la terraza en el jardín.

El pequeño jardín fue suficiente para satisfacer todos los requisitos para el uso actual. Las vistas interiores definen su composición. A pesar de los exigentes cambios en el jardín, el viejo cerezo siguió siendo su característica dominante. Unas semanas después de mudarse, toda la familia cosechó cerezas.