Por GLOCAL
En 2012, la diseñadora textil, Marisol Centeno fundó Biyuu como una marca que busca rescatar las técnicas tradicionales de producción de textiles para realizar diseños contemporáneos de tapetes con una visión de calidad, vanguardia y responsabilidad social. El objetivo de Biyuu es que sus tapetes cuenten historias contemporáneas que dialoguen con la tradición para expresar emociones a través de la combinación de color, textura y forma. Además de brindar calidez, armonía y vida a cualquier espacio y crear ambientes confortables, tanto para trabajar como para vivir. Son elaborados a mano, con materiales naturales. Se trata de productos textiles de lujo que entienden y respetan el proceso ritual y tiempo que requiere la producción artesanal.
Norte 61
Se inspira en la idea de progreso que se difundió al norte del México, cuando en 1961, empezó a circular El Chepe, un ferrocarril que recorría la Sierra de Chihuahua y que conectaba bosques y desiertos. A lo largo de sus recorridos, el Chepe se fue impregnando de óxido, lo cual demostró su vulnerabilidad ante el poder de la naturaleza. Los tapetes de esta colección muestran el enfrentamiento del progreso ante la naturaleza a través del color, la textura y la composición. Para el teñido de la lana utilizaron por primera vez la técnica japonesa llamada Shibori. Los materiales son algodón mercerizado y lana Merino y Lincoln, característica de la marca.
Moderno
Los tapetes que componen esta colección se inspiran en cómo usaban los arquitectos de la denominada época moderna el volumen, la luz y la sombra. El diseño de esta colección juega con esos contrastes.