Por GLOCAL
Llamada ‘la pequeña Europa’ porque en sus orígenes porfiristas la clase alta la habitó construyendo mansiones y residencias de estilo francés, la Colonia Juárez –nombrada así en honor a Benito Juárez– se ha convertido en uno de los barrios de la Ciudad de México con un patrimonio inmobiliario más significativos. Por eso, el gobierno de la Ciudad de México y la Delegación Cuauhtémoc trabajan en la restauración de 15 calles, integrantes de la Zona Rosa, con la idea de mejorar la imagen, movilidad y calidad de vida tanto de los habitantes de la colonia como de los visitantes que a diario transitan por ahí.
La colonia Juárez ha sido testigo y protagonista del desarrollo urbano de la capital del país, experimentando ciclos de deterioro y renacimiento en sus más de cien años de historia. Cuenta en sus calles con cerca de 250 inmuebles de interés artístico, entre los que destacan más de 30 edificios históricos como el Instituto Mexicano del Seguro Social, la casona que alberga el Museo de Cera, así como algunos palacetes y el Templo del Sagrado Corazón del Niño de Jesús. La renovación de las calles de la Zona Rosa contempla una inversión cercana a los 265 millones de pesos y se espera se concluyan antes de finales de año.