Ling Ling ocupa un espacio privilegiado en la Ciudad de México, en el último piso de uno de los rascacielos más altos de la avenida Paseo de la Reforma. El objetivo del restaurante es crear un ambiente atractivo y versátil que invite a los huéspedes a extender su estadía del día a la noche, disfrutando de una experiencia relajada junto con las mejores vistas de la ciudad.

El concepto de interiorismo del restaurante partió de la idea de crear un espacio que recordara los grandes patios y terrazas característicos de la arquitectura mexicana. Uno de los mayores desafíos en el diseño del proyecto fue cómo generar la sensación de estar en un patio en el piso 56. La respuesta fue un enfoque formal y un proceso de diseño utilizando elementos estructurales y métodos de construcción para ayudar a desdibujar el límite entre la arquitectura y el diseño de interiores. Surge la idea de crear un espacio de triple altura con estructura porticada y frondosa vegetación.

Ling Ling: experiencias y vistas

Empleando una extensa paleta de matices vegetales y la luz como fuerza motriz de todo el proyecto, el restaurante se desarrolla como un sitio lleno de carácter y textura, tanto por dentro como por fuera. Con eso en mente, cada espacio y habitación responde directamente al deseo de mejorar las vistas y experiencias que se ofrecen.

Alternativamente, el salón interior y el comedor están encerrados dentro de una estructura abovedada construida con técnicas de estereotomía de madera, resaltada por una iluminación suave y equipada con muebles especialmente diseñados.