Urbano, emocionante, funcional así es como describen sus creadores a esta línea de mobiliario producida por las marcas Mini y los fabricantes de muebles daneses Republic of Fritz Hansen quienes han hecho historia con sus icónicos diseños.
Cinco años después de su primer trabajo en conjunto con la creación del Mini Airstream por Fritz Hansen (concepto remolque), realizaron su segunda colaboración de diseño para la pasada edición de la expo Blickfang en Copenhague. El proyecto es un homenaje a la Classic Drop Chair, la cual e ahora luce un aspecto icónico inspirado en el concepto automovilístico del Mini Cooper.
La Drop Chair fue diseñada para el renombrado SAS Royal Hotel en Copenhague en 1958, un año antes de que el clásico Mini revolucionara el panorama automovilístico. Hoy en día se encuentra entre las piezas más célebres del diseño icónico muebles. “Junto con nuestros rigurosos estándares de diseño, los textiles utilizados en el Mini se van enfrentado a una serie de requisitos”, dice Annette Baumeister, jefe de diseño de Mini Colores y tapicerías. “Los materiales deben ser intemporales, cómodos y funcionales. La experiencia para renovar un clásico mobiliario era un reto apasionante, “Lo mejor de ambos mundos: Sillas Fritz Hansen y Drop por Mini.
El resultado es un par de piezas individuales que muestran la fusión entre el pasado y lo contemporáneo. Los cojines del asiento con sus insertos cosidos prestan tanto las sillas la esencia de un interior del automóvil, mientras las costuras en contraste y la tubería de color – sello Mini claves de estilo – citan lenguaje de diseño familiar de la marca.
Su estructura hace eco de uno de los colores de carrocería más populares para la familia actual Mini durante varias generaciones. Los puntos destacados son de cuero azul y un patrón de tejido diamante que hizo su primera aparición en el Clubman Mini Concept presentado en este año del Salón de Ginebra.