Para poder hacer el banco Ripples, una banca para exteriores –en 2011–, el estudio tuvo que utilizar madera okoumé –o ébano de Gabón–. Se trata de una material muy denso y resistente para ambientes naturales; su buena textura y su capacidad de pulido suave la hacen muy valiosa como madera ornamental. Originaria de África tropical Occidental, esta madera cuenta con características imprescindibles para los muebles de exteriores ya que se le reconocen propiedades de dureza y durabilidad.
Ripples es un homenaje a Toyo Ito que se convirtió en un objeto icónico al ser ganador del Compás de Oro 2004. Moldeado con maestría artesanal, que transmite la poesía delicada del arquitecto, utiliza sutiles ondas que nacen de la madera para generar ritmos y movimiento en la pieza.
La banca está elaborada con chapa de madera compuesta por varias capas superpuestas con vetas cruzadas, un panel inferior contrachapado de abedul y un alma metálica interior. El punto de drenaje se da en el nudo de las concavidades del asiento evitando el encharcamiento.A modo de madera esculpida y con estructura invisible, se genera un objeto natural y, al mismo tiempo, moderno, digno de la firma Horm.