La fuerza motriz que inspiró a Malafacha en su colección otoño/invierno 2012 “God BlesstheChild” fue la enriquecedora historia de Olver Twist y las palabras de su autor Charles Dickens: “Nunca he visto que de la maldad mas absoluta no pueda extraerse una lección de pura bondad”. Recuperando elementos estéticos de los lugares y personajes olvidados en las ciudades, la nueva línea emplea tonos de animación, diversión y entretenimiento. Exhibiendo el lado obscuro urbano, Malafacha hace una reflexión social de los sujetos lúgubres y abandonados que se esconden entre las banquetas acartonadas con una perspectiva infantil e inocente, para descubrir en estas apariencias color y alegría. Para lograr el retrato figurativo de las personas “invisibles” se usa en la ropa capas, parches, componentes surreales, Knickerbockers (pantalones bombachos) y gabardinas largas, logrando una apariencia informal y “desarreglada” pero reconfortante y vivificadora. Esta inspiradora colección nos da una lección a todos de la magia con la que las cosas se anteponen ante nosotros y la filosofía con la que las tomamos y decidimos ver el mundo en el que vivimos.