Ubicada a 25 km de la frontera entre Estados Unidos y México, Casa Caldera se encuentra en un paisaje abierto arenoso y montañas distantes. Por su proximidad a la frontera y el paso constante de los inmigrantes llevó al propietario a solicitar una residencia que fuera segura e impenetrable.
Construido con un material compuesto por una mezcla de cemento, scoria (material volcánico, ligero y áspero al tacto) y agua que está apisonada en un encofrado. Sus paredes la hacen una estructura rectangular sólida, provista de aislamiento y masa térmica.
En una estructura de 88 metros cuadrados de tipología vernácula, que contempla un plan de dos dormitorios y una sala de estar que desde el exterior son apreciadas a través de grandes puertas de doble hoja a los extremos y que conectan hacia el exterior.
Tiene ventilación cruzada natural, gracias a aberturas en ventanas y ‘zaguán’ mientras que algunas de las necesidades en la casa son cubiertas por elementos del exterior como madera para la calefacción, agua través de un pozo cercano y uso de energía solar.
DUST es un despacho conformado por arquitectos, artesanos, artistas, diseñadores y constructores enfocados en la tradicional práctica de un maestro de obras. Fundada en Tucson en 2007 en una colaboración iniciada por Cade Hayes y Jesús Robles.