La diseñadora Kateryna Sokolova ha recreado las formas redondeadas caladas de la artesanía tradicional en acero y las ha colgado en suspensiones casi invisibles. Su transparencia crea sombras pintorescas y una ilusión óptica, donde la suspensión parece flotar ingrávida.
Para algunas personas, las luminarias Gravity parecen una especie de drones innovadores de una película fantástica sobre el futuro e incluso una gran explosión de cómo los científicos la visualizaron.
El modelo más grande: Origin (diámetro 120 cm/47.2 pulgadas) fue creado para espacios amplios con techos altos y luz tenue como restaurantes o vestíbulos de hoteles donde se ve celestial y misteriosamente. Los otros dos modelos tienen dimensiones más pequeñas (diámetro de 86 cm/33.8 pulgadas y de 68 cm/26,7 pulgadas) y se adaptan tanto a proyectos comerciales como residenciales. Todos los modelos vienen en dos colores: dorado o negro.
“A menudo encuentro formas para mis nuevos objetos en viajes. En este caso, quería crear un objeto emocional que nos remite a algunas formas tradicionales asiáticas, pero parece moderno e incluso un poco futurista. La idea original se basa en varias formas, como auténticas trampas de pesca asiáticas, elegantes sombreros coreanos tradicionales y bobinas de incienso en espiral que vi colgando del techo de los templos en Hong Kong”, explica Sokolova sobre el diseño de sus piezas.